Los montañeros en ocasiones buscamos la comodidad de los caminos bien marcados, de ancho considerable y de firme regular. Siempre tenemos la posibilidad de elegir nuestras rutas en función de nuestros intereses y nuestras habilidades. Los pastores y pastoras de los Picos de Europa en muchas ocasiones no tenían esa posibilidad de elección. El terreno por el que muchas veces se aventuraban con sus rebaños de cabras carecía de itinerario fácil y sin peligros, y es por este motivo por el que en ocasiones algunos de ellos perecían despeñaos en parajes que a muchos de nosotros nos parecen imposibles de recorrer.
La necesidad de unir zonas de pasto y de comunicar de manera lo más directa posible lugares de por sí aislados o distanciados considerablemente, hicieron de los pastores los verdaderos descubridores, exploradores, e investigadores de pasos y sedos que, en muchas ocasiones, rayaban la verticalidad. En unos tiempos en donde la escalada no había tomado el cariz deportivo que tiene hoy, ellos ya trepaban y destrepaban jugándose el tipo por sus animales.
Uno de esos muchos pasos en el Desfiladero de La Hermida que hemos podido conocer gracias a Rafael Roiz Campo, pastor de Bejes, es el conocido como "La Armaura", paso increíble que permite superar los muros rocosos que se localizan sobre la gran pedrera de La Llastrona, comunicando la misma con la zona inferior del Costazu Buréu y el Praucu. El sedo en cuestión permitía recorrer toda la zona baja del Costazu y comunicar el Praucu con Cualcantu, la Cueva El Dental y otros parajes en donde el pastor y sus rebaños desempeñaban su labor diaria.
Otro zoom hacía el paso de La Armaura. |
Para acercarnos a conocer el paso de La Armaura debemos de recorrer antes todo un paraje extenso hasta alcanzar el lugar conocido como El Dental, lugar estratégico de entrada a La Llastrona y paso a Cueva Carcalosa por La Concha Los Esquilos , otro de esos itinerarios de pastores.
La descripción de como alcanzar El Dental y la Cueva El Dental se encuentra en la siguiente entrada:
El paso de la Armaura permite comunicar zonas de pastoreo, pero tanto llegar a él como la posterior continuación y posibles salidas requieren de horas de caminata por terreno complejo y en el que la orientación es complicada.
A continuación describiremos de forma orientativa el paso en cuestión con la única finalidad de dejar constancia del mismo.
Una vez nos hemos situado en La Cueva El Dental (ver enlace adjunto anterior para ello) nos tenemos que desviar del tenue sendero que nos dirige a cruzar La Llastrona por su zona superior, recorrido descrito en el enlace anterior, para subir bajo el filo rocoso del Dental, por encima de un pedrero bastante extenso, entre el pedrero y el muro del Dental. Toda esta subida carece de sendero y uno tiene que guiarse por su intuición para encontrar la zona mejor para progresar. Arriba tenemos siempre presente un gran paré con vetas negruzcas y sobre el que se asientan algunas huertas pobladas de encinas. Nuestro objetivo será el de ir ascendiendo para situarnos bajo el mencionado paré, cruzando para ello en su zona superior un "brazo" o canchal secundario de La Llastrona que se pierde en una horcá más arriba. Mientras ascendemos ya damos vista arriba al lugar en donde se localiza el paso y sedo de La Armadura, sobre una pequeña mata de encinas y bajo un paré de caliza negra (marcados ambos parajes con sendas elipses en las imágenes). Por el camino se localiza el Covaju El Fresnu, que nosotros no localizamos, y podremos encontrarnos con alguna sorprendente armadura que no hace sino que evidenciar la vida pastoril que tuvo todo este territorio en otros tiempos.
Como hemos comentado con anterioridad debemos aproximarnos hasta la base del gran paré que tenemos por encima, para ello deberemos de atravesar un estrecho y empinado canchal antes de situarnos en un bosquete que crece bajo el paré mencionado. Una vez en el bosquete deberemos realizar una travesía bajo el paré, buscando los mejores pasos entre el arbolado y arbustos, hasta lograr dar con el paso de entrada a la "pequeña mata" boscosa sobre la que se ubica el espectacular sedo de La Armaura. (marcado con una elipse en las imágenes)
Una armaura nos permite descender a la pequeña güerta, para luego afrontar por encima de la pequeña mata boscosa el paso que nos va a permitir superar el muro y salir a terreno menos complejo.
El sedo, a primera vista imposible, se va marcando en la vertical de la roca, permitiéndonos en sucesivas trepadas, alcanzar una pequeña vira de salida a nuestra izquierda, logrando así superar un enclave escondido y por el que en principio parecía impensable progresar. El sedo, debido a su localización y a la ausencia de cabras en la zona, se esta cerrando por la vegetación, pero la roca manchada nos guía en la buena dirección hasta salir a terreno abierto, aunque tomado por las árgumas. Los pasos de trepada tienen buenos agarres pero uno no puede permitirse un resbalón en este punto.
La Armaura de bajada a la pequeña mata boscosa sobre la que tenemos que ascender para superar el paso clave de la jornada. |
Trepadas para pasar del paso "A" al paso "B". Unas hierbas en la roca, marcadas dentro de una elipse, nos sirven para situarnos sobre el terreno. |
Alcanzando el paso superior del muro |
Saliendo a terreno menos complejo una vez fuera del muro vertical por el que hemos trepado. Arriba vemos el paré negruzco sobre el que se localiza el sedo de la Armaura. |
Saliendo a Costazu Buréu y La Cotera Las Vacas |
Mirando el recorrido realizado. |
Una vez fuera del paraje de La Armaura entramos en la zona inferior del Costazu Buréu, por donde antaño existía un sendero que en travesía pasaba por La Cotera Las Vacas en dirección a Senderu Praucu y Praucu.
Una vez en el Costazu Buréu entramos en un terreno muy amplio tomado por la árguma en donde la mejor opción consiste en realizar la mencionada travesía por su zona inferior hasta alcanzar el filo del Costazu. Llegados al filo podemos realizar la subida próximos al mismo hasta alcanzar la Pica Buréu y salir por arriba al Llanu Agero, teniendo desde aquí un regreso sin problemas hasta Allende. La otra opción consiste en destrepar la Armaura de nuevo y desandar lo andado, opción en la que hay que prestar especial atención. Cualquiera de las dos opciones son horas de "lucha" entre árgumas y zarzas, por lo que hay que tenerlo contemplado para que no nos falten horas de luz. El terreno por el que nos movemos es difícil en cuanto a la orientación y será necesaria una buena preparación previa de la actividad.
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